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Usted sobrevivió “Black Friday”, “Cyber Monday” y “Giving Tuesday”.  ¿Podrá “sobrevivir” la fiesta de la oficina y los posibles problemas que representa para Recursos Humanos?  Por favor no deje que nadie se presente a la fiesta vestido como este individuo.

¿Y qué es una fiesta sin bebidas alcohólicas y un blog sobre las leyes sin el “tipo pesa’o” que predica moderación y beber razonablemente?

Todos conocemos los peligros de beber y manejar. Incluso aunque la compañía pueda evitar la responsabilidad legal por las acciones de un empleado borracho, ninguna empresa desea la mala reputación ni la culpa moral que sin duda prosigue a los hechos. Los empleadores deben tomar medidas para limitar el consumo de alcohol en la fiesta de los Días Festivos. Quizá deban tener un “cash bar” o exigir a los empleados que utilicen un número limitado de boletos para “comprar” las bebidas y disuadirlos de compartir sus boletos con otros compañeros de trabajo. La compañía debe contratar cantineros profesionales y decirles que exijan identificación a los invitados que parezcan no tener mucho más de 21 años, así como negarse a servir bebidas a los invitados que en su opinión “hayan tomado una de más” y reportarlos. Asegúrese de que la última llamada para dejar de beber se haga mucho antes de que termine la fiesta y trate de alentar a los participantes personas a quedarse después de que el alcohol haya dejado de fluir. La compañía puede realizar rifas o intercambios de regalos después de la última llamada. Los empleadores también deben tramitar el transporte gratuito de cualquier empleado que no pueda o no deba conducir. Hay empresas que no solamente llevan al empleado a la casa sino también a su automóvil. Muchas incluso pueden pagar códigos de evento de Úber o Lyft que sus empleados entonces pueden utilizar para volver sanos y salvos a sus casas.

Un traguito puede ser todo lo que necesita un posible acosador sexual para atreverse a proponer algo indecente, o besar o toquetear a una compañera o compañero de trabajo. Con anterioridad a la fiesta, el empleador les debe hacer saber a los empleados que todas las normas de decoro de la empresa permanecen en vigor…. que no se va a permitir toquetear, besar,  “sextear” ni quitarse la ropa en público. En solo segundos alguien puede subir a un sitio de medios sociales la foto de un compañero de trabajo en una posición comprometida. Los empleadores deben evitar prohibir que se tomen fotos o “selfies” en la fiesta pero sí deben exhortar a los empleados a que actúen responsablemente y publiquen solamente fotos de la fiesta en que sus compañeros no hagan el ridículo. Quizá la advertencia le sirva de lección al que quiera hacer el ridículo si es que no disuade al que quiere actuar de fotógrafo.

Incluso aunque la conducta atrevida o inapropiada en la fiesta no constituya acoso sexual, de todas maneras va a formar parte del chismorreo en la oficina al día siguiente. Alguien puede resultar avergonzado o resentido y esto causar tensiones o retaliación en el trabajo más adelante. Las consecuencias de la fiesta bien pueden durar durante buena parte del año nuevo.

Así que diviértanse y disfruten la temporada de fiestas pero exhorten a los empleados a que actúen responsablemente.